La Birra Bar nació en Boedo. Hoy cuenta con 12 sucursales, dos propias y 10 franquicias. En un mes inaugura su negocio en Estados Unidos y para fin de año estará presente en Madrid.
Abrir una hamburguesería en Estados Unidos, la meca de la comida rápida, parece difícil. Hacerlo en plena pandemia y en medio de una fuerte crisis del sector gastronómico, es doblemente arriesgado. La Birra, el bar que nació hace dos décadas en Boedo y hoy cuenta con 12 sucursales entre Capital y el Gran Buenos Aires, ahora apuesta por el mercado de Miami en donde abrirá su primera sucursal en julio y llegará a Madrid antes de fin de año.
Se trata de la primera cadena argentina de hamburguesas en llegar al mercado norteamericano. «En Miami hay decenas de hamburgueserías pero estamos convencidos que ninguna ofrece un producto como el nuestro con una elaboración propia al 100%», explicó al diario El Cronista Comercial, Daniel Cocchia socio fundador de La Birra Bar.
«Los gastronómicos estamos viviendo un momento muy duro. Sin embargo La Birra vive una realidad atemporal porque aún en pandemia seguimos abriendo locales. Durante el año pasado pudimos abrir una sucursal en Banfield y otra en Martínez», explicó Cocchia.
De la docena de locales con los que hoy cuenta la marca, dos son propios (en el barrio de Boedo) y el resto son franquicias. Ahora el nuevo local de Miami también será propio. «Queremos asegurarnos la calidad de lo que vamos a ofrecer, entendemos que es la puerta para saltar a otros mercados», explicó el gastronómico.
Pero ¿Cuál es la receta para seguir creciendo y no disminuir el número de ventas aún en pandemia? «Sabemos que ofrecemos un productos diferente y nos sorprende la fidelidad que generamos con nuestros comensales», remarcó Cocchia.
«No bajaron las ventas durante el 2020, inclusive subieron. Cambió el modelo de rentabilidad, es un modelo más flaco. No es el modelo ideal», reconoció el empresario.
Lo curioso es que aún con las restricciones y las dificultades para trabajar la marca tuvo récord de ventas de hamburguesas. «No quiere decir que tuvimos la misma rentabilidad pero no solo pudimos mantener el caudal de clientela sino que lo incrementamos», agregó.
La clave fue readecuarse rápidamente al nuevo contexto. «Tuvimos que ser creativos, apostamos fuerte al delivery y generamos espacios para comer al aire libre. Estos dos puntos fueron fundamentales», resumió desde Miami en donde están ultimando detalles para en un mes abrir su nuevo local.
La llegada a Miami era un proyecto pre-pandemia que se fue postergando hasta ahora. «Todo quedó en stand by el año pasado, con la consultoría mantuvimos los acuerdos, pero todo quedó congelado. Después del parate volvimos hace cinco meses al ruedo y hoy estamos finalizado la etapa de decoración del local», indicó Cocchia.
Pero el plan de expansión continúa también en el viejo continente, pero con otro formato. «Este año tuvimos la propuesta de un inversor para llevar nuestra marca a Madrid y Portugal. Estamos avanzando con el desarrollo para abrir el primero de los locales antes de fin de año, ahora estamos buscando locación», indicó.
«La propuesta llegó de la mano de un cliente habitué que se fue a vivir a España. Si bien nosotros vamos a supervisar la calidad de los productos y la atención, la inversión es de un tercero», explicó el gastronómico.
La Birra Bar se creó en 2001, en pleno estallido social, como una propuesta de cafetería en el local de San Juan 4359 en Boedo. Lindando con Rotisería Dani, propiedad de los padres de Daniel Cocchia, compartían cocina y platos a través de un pasaplatos que crearon como unión entre ambos locales.
Una vez consolidado el negocio, se enfocaron en el café de especialidad y, en 2014, se embarcaron en la ardua tarea de lograr la hamburguesa perfecta.
Primero surgió el medallón de carne, un blend compuesto por una proporción exacta entre diferentes cortes de carne vacuna. Más tarde el pan que, después de desestimar muchas propuestas de expertos panaderos por no asemejarse al producto que imaginaban, comenzaron a desarrollarlo ellos mismos.